De momento, se estima que hay casi 900 estudiantes bajo los escombros en Dujiangyan, a unos 50 kilómetros del epicentro del seísmo, informa Xinhua.
Al menos hay seis muertos entre ellos, aunque se espera que la cifra aumente según los grupos de rescate puedan hacer su trabajo.
Se contabilizan también cuatro fallecimientos más en un grupo de niños por el derrumbe de dos escuelas primarias en Chongqing (suroeste de China), a unos 300 kilómetros del epicentro, en el distrito de Wenchuan, una zona montañosa a 92 kilómetros al noroeste de Chengdu.
Los edificios de otras cinco escuelas en la provincia suroccidental china de Sichuan también colapsaron por el temblor.
El primer ministro, Wen Jiabao, ha calificado de "desastre" el seísmo y ha pedido calma y valor a la población, según ha afirmado en una entrevista en la televisión.