Mel Greig y Michael Christian explicaron que "no pasa un minuto en el que no piensen en la familia" de Jacintha Saldanha, quien se habría suicidado tras ser víctima de una broma donde se reveló el estado de la princesa cuando estaba internada por su embarazo.
"Pensamos en hacer una llamada que iba a durar 30 segundos hasta que nos iban a colgar. Tan inocente como eso", manifestaron en su primera entrevista tras el incidente.
Los presentadores de la emisora 2Day FM se comunicaron con la clínica y se hicieron pasar por la reina Isabel II y su hijo, Carlos, para conseguir datos de la salud de la duquesa.
Saldanha atendió el teléfono y pasó la llamada a una compañera que contó detalles, en medio de un operativo de mucha cautela montado por el Palacio de Buckingham.
"Creíamos que un centenar de personas ya lo habían intentado antes que nosotros. Era una idea tan tonta y los acentos eran terribles, ni por un segundo esperamos que nos atendiera Kate o tener una conversación con alguien", dijo Greig.
Al ser consultado sobre su reacción tras enterarse de la muerte de la enfermera, Christian comentó que quedó "triste y con el corazón destrozado".
Por su parte, Greig recordó que lo primero que pensó es si la mujer era madre: "No hay un minuto en que no piense en su familia y en lo que deben estar pasando".
Saldanha apareció muerta el viernes pasado en un alojamiento para el personal del hospital Rey Eduardo VII en el centro de Londres.
La investigación sobre el presunto suicidio comenzará en los próximos días, y los conductores australianos se mostraron dispuestos a declarar si así lo consideran las autoridades.
Fuente: Télam