"Delicados informes indican que los lazos de inteligencia entre Cuba y Venezuela son tan estrechos que sus agencias parecen rivalizar para conseguir la atención del gobierno bolivariano", indica el cable 51158, fechado el 30 de enero de 2006.
Según el diario El País, los cimientos de esta relación se remontan a 1994, cuando Chávez viajó a Cuba para conocer a Fidel Castro a quien idolatraba, y allí se fraguó una amistad ideológica y personal, que explica en buena medida la amplitud de los lazos binacionales.
A su vez, también se publican declaraciones en las que se deja ver el desarrollo de una guerra “psicológica”, en donde se muestran claras maneras de propagar una imagen deteriorada de los Estados Unidos dentro de la región bolivariana. Expone El País que si en la época anterior a Chávez tenía una imagen positiva del 65% de la muestra, hoy ha caído hasta "un histórico" 31%.
Es entonces cuando la Embajada de los EEUU pide fondos para contrarrestar esa campaña con otra que llegue a los venezolanos de menores ingresos y destaque los históricos y mutuamente beneficiosos lazos entre Venezuela y los Estados Unidos.
Finalmente, los diplomáticos terminaron programando una gira propagandística por todo el país para "interactuar" con la gente y tratar de modificar sus negativas percepciones y juicios sobre el país norteamericano.
Pero no siempre han sido así los servicios de inteligencia , sino que la orientación de este trabajo cambió completamente desde la llagada de Chávez a la presidencia.
Por otra parte, en materia de seguridad cubana los conocimientos que se poseen son extremadamente valiosos. Un cable desde la Sección de Intereses de Estados Unidos en La Habana detalla cómo son estos mecanismos de seguridad y los califica como profesionales y capaces. Asimismo, indica que son efectivos persiguiendo a quienes consideran terroristas y a los que, creen, están “financiados por los Estados Unidos”.
La sucesión de cables confidenciales y secretos certifican la preocupación norteamericana por la presencia en Venezuela de aproximadamente 40.000 cubanos, asignados a los diferentes ministerios y sectores de la administración local, la gran mayoría médicos y personal de enfermería. (Infobae)
