Cerca de 120 militares belgas participarán en la misión, que partió hoy mismo hacia Jordania, con el objetivo final de participar en los ataques aéreos contra posiciones del EI en Irak y después de que este país solicitara a Bélgica ayuda militar para combatir a los yihadistas.
El despliegue belga, que ya poco antes del voto en el Parlamento había partido de Florennes (sur del país) en dirección a una primera escala en Grecia, se instalará en la base aérea de Azraq, en Jordania, a un centenar de kilómetros de Ammán, desde donde despegarán las misiones aéreas hacia Irak.
El país tiene previsto enviar seis F-16, ocho pilotos y un equipo de apoyo.
Además, una veintena de militares establecerá los planes de vuelo y guiará a los pilotos, mientras que cerca de 60 personas se encargarán del mantenimiento técnico de los aviones, de los radares, del armamento y de otras tareas de ayuda los pilotos.
A esto se añade un contingente de 30 soldados que se encargarán de proteger al personal y el material y dos médicos que acompañarán al destacamento.
El Parlamento belga ha solicitado en la resolución aprobada realizar todos los esfuerzos necesarios en el plano político y diplomático, financiero, económico y socio-humanitario para "lograr una solución duradera para la región", indicó en un comunicado tras la votación.
También instó al gobierno belga a tomar las medidas necesarias para "anticipar un posible aumento del nivel de la amenaza terrorista interna en el país".
Fuente: Télam