En el campamento de refugiados de Al Jalazun, una docena de palestinos resultaron heridos por disparos de balas y el lanzamiento de gases lacrimógenos. En Al Jalazun se registraron los altercados más violentos, en los que también resultaron heridos cuatro soldados israelíes, afirmó la agencia Europa Press.
Un portavoz del Ejército israelí expresó que "300 palestinos estaban lanzando piedras, bombas incendiarias y quemando neumáticos", ante lo que las "fuerzas israelíes respondieron con el objetivo de dispersar los disturbios".
En la localidad de Silwad, ubicada al norte de Ramallah, más de 10 jóvenes palestinos resultaron heridos por balas de goma. Otros cuatro soldados israelíes fueron heridos en los choques con los manifestantes, según fuentes militares y debieron ser evacuados en ambulancias.
Las protestas comenzaron luego de las oraciones del mediodía en los barrios de las afueras de la ciudad y produjeron disturbios que, luego, se extendieron al centro de Silwad, sitio con fuerte presencia militar israelí.
Mientras tanto, cuatro personas, incluido un menor, resultaron heridos en la manifestación que se viene celebrando cada viernes en Kafr Qaddum, en contra del bloqueo de la ruta que une esta localidad con Nablus, la ciudad más cercana, cortada desde el año 2000.
Las fuerzas israelíes aplacaron la protesta con el lanzamiento de bombas de estruendo, gases lacrimógenos y con el disparo de balas de acero contra los manifestantes, según las fuentes.
Un portavoz militar israelí agregó que fueron unos 40 los palestinos que se enfrentaron con las fuerzas de su país.
Por último, dos palestinos también resultaron heridos debido al lanzamiento de gases lacrimógenos y uno fue detenido por el Ejército israelí durante los enfrentamientos que derivaron en una protesta en Beit Ummar, sitio donde celebraban la liberación de un palestino encarcelado durante ocho años.
Allí, también resultó herido un soldado luego de ser golpeado con una piedra.
Fuente: Télam