Aunque las cifras mensuales de muertos aún son bastante menores que en ese periodo de virtual guerra civil, un aumento de los ataques registrado desde hace siete meses ha generado temores de una recaída en la violencia a gran escala.
Catorce de los cuerpos hallados hoy correspondían a hombres no identificados de entre 20 y 30 años, todos ellos muertos a tiros, dijeron fuentes policiales y fuentes médicas.
Ocho de ellos fueron encontrados con los ojos vendados en el barrio de mayoría sunnita de Dura, mientras que los otros seis estaban tirados en un canal en el barrio chiíta de Shula, agregaron las fuentes, citadas por la cadena BBC.
El aumento de los ataques registrado desde hace siete meses ha generado temores de una recaída en la violencia a gran escala
En el norteño barrio capitalino de Hurriyah, en tanto, una familia de cinco miembros -tres mujeres y dos hombres- fue encontrada muerta a tiros en su casa.
Poco después de la puesta del sol, 11 personas murieron y otras 25 resultaron heridas cuando un atacante suicida detonó sus explosivos dentro de una carpa donde se celebraba un funeral sunnita en Abu Ghraib, en el oeste de Bagdad, dijo la policía.
También en Bagdad, una bomba explotó en el sureño barrio de Dora y mató a dos civiles, mientras que dos más fallecieron por el disparo de proyectiles de mortero en Albu Eitha, en el suroeste capitalino, y otra persona fue asesinada por hombres armados en Bayaa, un barrio del sureste bagdadí, agregaron autoridades.
Fuera de Bagdad, un atacante suicida estrelló un auto cargado de explosivos contra un puesto de control custodiado por fuerzas de seguridad kurdas en la ciudad de Khanaqin, al norte de la capital, y mató a tres personas, informó la policía local.
Otro suicida hizo estallar un cinturón de explosivos en la puerta de una comisaría en la ciudad de Habbaniyah, al oeste de Bagdad, permitiendo que un segundo atacante ingresara en la estación y se volara por los aires dentro del edificio, dijo la policía.
Las explosiones mataron a cinco policías, agregó la fuente.
Otros cuatro policías y dos insurgentes murieron durante un ataque a una comisaría en Ramadi, al oeste de la capital.
Un ataque a tiros desde un auto causó la muerte a dos docentes en la ciudad de Hadra, en el norte de Irak.
En la también norteña Mosul, hombres armados asesinaron a un empleado del gobierno cuando caminaba hacia su casa.
Fuente: Télam