La principal acusación de la oposición es que Yingluck no es más que un títere de su hermano y ex primer ministro, Thaksin Shinawatra, quien fue derrocado por un golpe de Estado en 2006 y, pese a su enorme popularidad, aún vive en el exilio para evitar cumplir con una condena por corrupción que pesa sobre él.
El mes pasado, la primer ministra intentó hacer avanzar una amnistía que hubiera permitido la vuelta de su hermano, pero abandonó el proyecto porque generó rechazo en amplios sectores de la oposición. La oposición, no obstante, redobló sus protestas.
El Parlamento empezó a debatir una moción de censura contra la primera ministra, pese a que la mandataria dispone de la mayoría suficiente en la cámara para derrotar la iniciativa
En el Parlamento, la premier no peligra ya que el oficialismo goza de una amplia mayoría obtenida en las elecciones de 2011.
"Si podemos hablar, creo que el país volverá a la normalidad", pidió hoy la primer ministra, que reiteró que no dará la orden de reprimir las protestas.
Pero pese a su llamado al diálogo, la moción de censura comenzó a ser discutida hoy en el Parlamento y el jueves se espera que el gobierno supere sin problemas la votación.
En la calle, en cambio, la situación era más inestable.
Liderados por el ex vice primer ministro Suthep Thaugsuban, los manifestantes opositores ocuparon hoy los edificios de los ministerios de Agricultura, Turismo y Transporte, conservaron el de Finanzas que habían tomado ayer y sitiaron completamente el de Interior, informó la agencia de noticias EFE.
Su único retroceso fue en la sede de la Cancillería, que habían tomado ayer y hoy aceptaron desocupar.
Suthep pasó la noche de ayer en la masiva toma del Ministerio de Finanzas y desde allí hizo público hoy sus aspiraciones.
"Si mañana derrocamos al régimen Thaksin, crearemos un consejo del pueblo al día siguiente", prometió a una multitud, luego de rechazar la posibilidad de llamar a elecciones anticipadas.
"Que el consejo elija un buen hombre para ser el primer ministro y buenos hombres para ser ministros. Que sea un dream team, un gabinete de ensueño y del gobierno del pueblo", agregó.
Quienes lo oyeron y aplaudieron se hacen llamar Ejército Popular para Derrocar el gobierno de Thaksin, y combinan las clases medias y altas de la capital, con los sectores monárquicos del país y aliados de la otra importante élite nacional, las Fuerzas Armadas.
En sus protestas el amarillo es el color que domina la escena, como lo era en 2008 cuando las llamadas camisas amarillas de la Alianza del Pueblo por la Democracia pedían terminar con el entonces gobierno dirigido por aliados de Thaksin.
Esa alianza proponía un nuevo sistema político con menos legisladores electos y más designados por la élite política.
La oposición ya adelantó que a partir de mañana intentará llevar su protesta al resto del país hasta hacer caer al gobierno nacional
Prueba de la composición socioeconómica de la masa opositora es que las protestas no han podido expandirse al resto del país y especialmente a las regiones rurales más pobres, donde Thaskin y su hermana siguen gozando del apoyo de una amplia mayoría.
Políticas como la universalización de la salud pública, la entrega de microcréditos a pequeños productores y campesinos, y la compra por parte del Estado del arroz a un precio mayor al del mercado luego de desastres naturales garantizaron que los hermanos Shinawatra ganaran todas las elecciones abiertas desde 2001.
En cambio, Suthep, el actual líder de la oposición, sólo alcanzó el cargo del viceprimer ministro después que el Poder Judicial y parte de la cúpula del Ejército orquestraron un golpe en 2010.
Durante su gobierno, Suthep fue una de las autoridades que ordenó reprimir masivas protestas de las llamadas camisas rojas que pedían la legalización del Partido de Thai Rak Thai de Thaskin. El saldo fue cerca de 90 muertos y alrededor de 1.800 heridos.
Consciente de que no goza del apoyo completo del Ejército y de que la policía tailandesa no tiene buenos antecedentes intentando contener manifestaciones públicas, la primer ministra Yingluck reiteró hoy que no reprimirá las protestas.
Inclusive, pese a que un tribunal emitió una orden de detención contra Suthep por promocionar la toma de edificios públicos, la policía informó hoy que no lo arrestará durante las manifestaciones para evitar incidentes en las calles.
Por ahora la policía se limita a rodear los edificios públicos de la capital para evitar nuevas tomas. Sin embargo, la oposición ya adelantó que a partir de mañana intentará llevar su protesta al resto del país hasta hacer caer al gobierno nacional.
Fuente: Télam
