La fuente explicó a la agencia EFE que los 11 yihadistas muertos custodiaban dos puestos de control al momento del ataque, que causó también la muerte de 2 civiles que estaban en el lugar.
Desde el 3 de enero pasado, esa provincia y otras de la mitad septentrional del país son escenario de enfrentamientos entre el EIIL y el Frente al Nusra, filial siria de Al Qaeda, apoyada por otros grupos rebeldes.
Por otra parte, el Observatorio reveló que el presidente sirio, Bashar al Asad, emitió una orden -en calidad de secretario general del partido gobernante Al Baaz- en la que pidió a sus seguidores que no establezcan carpas electorales.
El objetivo es evitar que sean atacadas por los rebeldes como ocurrió el pasado jueves cuando murieron al menos 39 personas y otras 205 resultaron heridas en un atentado contra un acto electoral celebrado en una de esas carpas en la ciudad de Deraa, en el sur del país.
En las elecciones presidenciales del próximo 3 de junio Al Asad, en el poder desde 2000, se presenta a un tercer mandato que disputará con el diputado y miembro de la oposición tolerada Maher Abdel Hafez Hayar y el ex ministro Hasan Abdalá al Nuri.
En lo que va del conflicto sirio, iniciado en marzo de 2011, más de 162.000 personas perdieron la vida, según las últimas cifras provistas por el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
Fuente: Télam