Barreras comentó que el certificado médico de Garzón debe ser expedido por la Academia Colombiana de Medicina, la Federación Médica Colombiana y el Tribunal Médico de Ética, informó la agencia de noticias DPA.
"Lo que estamos haciendo es cumpliendo con la ley ante una situación inédita en la historia del país, porque se enferman al mismo tiempo el presidente y el vicepresidente", dijo Barreras, médico de profesión y alto dirigente del Partido Social de Unidad Nacional gobernante.
Según Barreras, si el diagnóstico de los médicos fuera positivo, el país podrá estar tranquilo ante la eventual necesidad de un remplazo temporal de Santos, pero en caso de ser negativo se debe pensar en la sustitución de Garzón.
La Constitución indica que el vicepresidente debe remplazar al jefe del Estado ante una ausencia temporal o absoluta y que si aquél tuviera algún impedimento, quien debe cumplir esa misión es el presidente del Senado.
No obstante, Barreras dijo que ese no es el actual escenario en Colombia, pues Santos no está en una condición de gravedad.
Santos, de 61 años, anunció anoche que se le había detectado un tumor cancerígeno en la próstata y que su médico personal, Felipe Gómez, y tres especialistas estadounidenses coincidieron en recomendarle que se sometiera a una operación para extirpárselo.
El mandatario aclaró que no delegará el mando pues será intervenido con anestesia local, por lo que no perderá la conciencia en ningún momento, y sólo deberá guardar reposo durante algunos días.
"Será una cirugía con anestesia regional, lo cual permite que conserve mi estado de conciencia antes, durante y después del procedimiento; voy a permanecer en la clínica unos días y estaré, por supuesto, con algunas limitaciones físicas, pero seguiré ejerciendo en todo momento mis funciones como presidente de la república", indicó Santos.
"Solamente me han recomendado que después de que salga del hospital no viaje durante unas semanas", añadió, al hacer el anuncio anoche, en un mensaje a los colombianos.
En tanto, Garzón, de 65 años, sigue convaleciente de una isquemia cerebral que lo mantuvo internado durante varios días en junio pasado.
El vicepresidente sufrió una obstrucción de la arteria cerebral posterior, que obligó a los médicos a inducirle un coma para garantizar su reposo mental durante una semana.
Garzón había tenido otro episodio de salud en agosto de 2010, cuando sufrió un infarto de miocardio sólo dos días después de haber asumido el gobierno junto a Santos, y los médicos le implantaron entonces cinco puentes coronarios.
Fuente: Télam