El lunes, y en medio de un estado de conmoción por la noticia, dejó su cargo quien era el encargado de las Relaciones con el Parlamento y jefe de la bancada laborista en la Cámara de losComunes, Robin Cook.
Este funcionario, el primer canciller de la nueva era laborista y hombre de profunda confianza de Blair, renunció a su cargo con un discurso que difícilmente olviden los británicos. (Télam-SNI)