El ataque tuvo lugar al sur de Hila, capital de Babel, cuando los presos eran trasladados de la citada prisión a la de Al Qasem.
No están claras tampoco las causas del suceso, pero se podría tratar de un intento fallido de los insurgentes sunnitas de liberar a los prisioneros.
En la última semana, los rebeldes denunciaron que la policía ejecutó a detenidos por supuestos delitos terroristas ante los temores de que fueran liberados al tomar la insurgencia el control de las comisarías o cárceles.
La ley antiterrorista, aprobada en 2005, es muy criticada por los sunnitas, que consideran que es aplicada contra ellos, en especial el artículo cuarto que estipula penas de muerte y de cadena perpetua para aquellos implicados en "delitos terroristas".
Este suceso coincide con la llegada a Bagdad del secretario de Estado norteamericano, John Kerry, quien efectúa una visita sorpresa para analizar con el primer ministro iraquí, Nuri al Maliki, y otros responsables el conflicto en Irak.
Kerry comenzó ayer una gira por Medio Oriente y Europa para abordar principalmente la situación en Irak, escenario de una ofensiva de insurgentes sunnitas y del yihadista Estado Islámico de Irak y el Levante (EIIL) contra el gobierno de Al Maliki.
Bagdad pidió a Estados Unidos que lance bombardeos aéreos contra los insurgentes, pero hasta el momento Washington se limitó a desplegar a 300 asesores militares, insistiendo en que eso no supone reiniciar sus operaciones de combate en Irak y que la solución al problema no pasa por una vía exclusivamente militar.
Los insurgentes sunnitas dominan amplias zonas del norte y el oeste de Irak y se han hecho con el control de varios pasos fronterizos con Siria y Jordania.
Fuente: Télam