El ahora ex presidente justificó su decisión en "la degradada situación sociopolítica y la amenaza de división dentro del Ejército" aunque consideró que ha "cumplido" con su deber.
El mandatario explicó que había decidido aplicar el artículo 43 de la Constitución burkinesa, que regula la inhabilitación temporal o permanente del presidente.
Según testigos, Compaoré abandonó el Palacio de Kosyam y viaja en un convoy militarizado en dirección a Po, una localidad situada a unos 175 kilómetros al sur de la capital y muy próxima a la frontera con Ghana.
Poco antes del anuncio, el coronel del Régimen de Seguridad Presidencial Issaac Zida, había anticipado su renuncia y había señalado que el ahora ex presidente estaba "en un lugar seguro". Zida, dirigió su mensaje ante decenas de miles de manifestantes que reclamaban la marcha del jefe de Estado en la Plaza de la Nación en la capital, Uagadugú.
"El poder pertenece al pueblo y es él el que decidirá las acciones a seguir", manifestó el coronel, quien también aseguró que todos los cuerpos del Ejército "están del lado del pueblo".
Decenas de miles de personas protestan desde hace tres días en contra del intento de Campaoré de modificar la Constitución para poder ser reelecto por quinta vez. En las protestas de ayer, las más graves, los manifestantes provocaron un incendio en el Parlamento.
Además, asaltaron y saquearon las sedes de la televisión y de la radio públicas, a las que obligaron a cortar la emisión, numerosas tiendas de la ciudad fueron saqueadas y las viviendas de diferentes ministros incendiadas.
Al menos 30 personas murieron y 100 resultaron heridas, según datos de la oposición. En cambio, las protestas de hoy se desarrollaron pacíficamente, según la agencia de noticias EFE. Campaore gobierna el país africano desde un golpe de Estado en 1987 y en el año 2000 modificó la Constitución para permanecer en el poder. Desde su independencia en 1960 hasta la llegada de Compaoré a la presidencia, la historia de Burkina Faso, antes conocido como Alto Volta, se ha caracterizado por una sucesión de golpes de estado.
Pese a ser uno de los países más pobres del mundo, Burkina Faso se posicionó como mediador en numerosas crisis regionales en los últimos años.
Además, con Compaoré como líder, el país ha sido un aliado de Estados Unidos y de su ex metrópoli colonial, Francia, en operaciones militares contra grupos islamistas en África occidental.
Fuente: Télam