Según el diario El Mundo, en un discurso televisado a los miembros de su partido, el jefe del Gobierno admitió que se ve obligado a renunciar al cargo por la polémica creada por la base estadounidense de Futenma y por varios escándalos financieros que salpicaron su mandato.
A la vez, justificó el mantenimiento de la base de Futenma en Okinawa en la necesidad de garantizar la seguridad en el Este de Asia y en Japón, y aseguró que su intención fue llevar a cabo una política "limpia" en su país.
Emocionado y al borde de las lágrimas, Yukio Hatoyama dijo que trabajó con una visión a largo plazo "difícil de entender" para la población japonesa.
El dirigente también pidió la dimisión del secretario general de su partido, Ichiro Ozawa, considerado uno de los hombres fuertes de la política japonesa y artífice de la victoria electoral de los demócratas en los comicios del 30 de agosto, que pusieron fin a más de medio siglo de Gobierno del Partido Liberal Demócrata (PLD).
El primer ministro insistió en que sus meses de Gobierno supusieron "un cambio en la historia política de Japón" y reconoció que su gestión del traslado de la base estadounidense de Futenma ha "molestado" a la población de Okinawa.
La ejecutiva del gobernante Partido Democrático (PD) de Japón presentará su dimisión antes de elegir a un nuevo presidente, que será el sucesor de Yukio Hatoyama al frente del Gobierno, según informó la cadena de televisión NHK.
Según la televisión pública, la plana mayor del PD, incluido su poderoso secretario general, Ichiro Ozawa, dejará sus cargos para dar paso a la elección de la nueva cúpula de la formación, posiblemente el próximo viernes.
El nuevo presidente del partido (cargo que hasta ahora ocupaba Hatoyama) será presentado como candidato a jefe de Gobierno ante la Dieta (Parlamento), donde tiene el respaldo asegurado ya que el PD cuenta con mayoría absoluta en la Cámara Baja.
El propio Hatoyama había pedido la dimisión de Ozawa, hombre fuerte del partido y artífice de su victoria electoral el pasado agosto y que se vio salpicado por un escándalo de fondos, al igual que le pasó a él.
El actual vicepremier y ministro japonés de Finanzas, Naoto Kan, es la figura mejor perfilada para suceder a Yukio Hatoyama, cuya experiencia como premier finaliza tras ocho meses de trabajo, tanto en el Ejecutivo como presidente de los Democráticos (DPJ).
Kan, que entre el 4 y 5 de este mes es esperado en el G20 financiero de Busan (Corea del Sur), se mostró decidido a afrontar el tema de la deflación que mina la reactivación económica, ejercitando creciente presión sobre el Bank of Japan (central) para mayores esfuerzos.
También Kan se dijo favorable al control de gastos y a reordenar las cuentas públicas visto el endeudamiento que se acerca a 200% del PBI.
Fuente: Télam.com.ar
