Más del 96% de los crimeos se pronunció el pasado 16 de marzo en un referéndum a favor del ingreso en Rusia, deseo que se formalizó el pasado viernes cuando el presidente ruso, Vladímir Putin, promulgó la correspondiente ley de anexión.
Lavrov subrayó, no obstante, que "nadie exige" que la comunidad internacional reconozca los resultados de la consulta separatista, condenada por varias potencias occidentales.
El ministro ruso abordó también con su par estadounidense la importancia de que los extremistas no participen en la vida política ucraniana.
"Creo que John Kerry, al menos, comprende la necesidad de impulsar el cumplimiento de los acuerdos suscritos el 21 de febrero", dijo, en alusión al documento firmado entre los líderes opositores y el entonces presidente ucraniano, Viktor Yanukovich, un día antes de que fuera destituido.
Sobre este punto, el ruso recordó que aún no se desarticularon todos los grupos armados, ni se desalojaron todos los edificios gubernamentales ni las plazas de Kiev.
"Estamos convencidos de que hay que comenzar una amplísima reforma constitucional con la participación de todas las regiones. Nosotros no podemos obligar a los políticos ucranianos, pero ésta es nuestra valoración de la situación", subrayó.
Además, criticó el hecho de que Ucrania firmara la parte política del Acuerdo de Asociación con la Unión Europea antes de la reforma constitucional y de la celebración de elecciones presidenciales previstas para el 25 de mayo próximo.
Fuente: Télam