Un mecánico de 23 años, identificado como Bruno dos Santos, que trabaja en un taller vecino al edificio que se derrumbó, contó que varias familias vivían en el lugar.
"Escuché un estruendo y salí corriendo. Llegué antes que los bomberos y logré salvar a tres niños, pero un cuarto ya estaba muerto", dijo a la prensa Dos Santos.(Telam)