En cambio, una alta figura del partido gobernante, la vicepresidenta segunda del parlamento, Blanca Eekhout, reivindicó el diálogo pero acusó a la oposición de haberle dado una "patada" al proceso debido a "órdenes de afuera".
"Creemos que es fundamental que se dé un espacio de diálogo transparente donde no se reciban órdenes de afuera, sino que lo construyamos de manera colectiva", dijo Eekhout en una conferencia de prensa transmitida por la televisora estatal VTV.
"La oposición ha puesto muchas condiciones y ha puesto muy poco para la aceptación de nuestras diferencias y el respeto a la diversidad", sostuvo la legisladora, según reprodujo la agencia noticiosa AVN.
Eekhout agregó que "esta patada a la mesa de diálogo pretende justificar la agenda de terrorismo y violencia que lamentablemente se diseña en Estados Unidos y cumplen los irresponsables que dirigen la derecha" venezolana.
Los cancilleres sudamericanos y el nuncio apostólico recibieron esta mañana a los dirigentes de la coalición opositora por segunda vez en menos de 24 horas.
Los mediadores "en este momento están haciendo esfuerzos para que se creen las condiciones de tal manera que el diálogo pueda continuar", afirmó tras ese encuentro el secretario ejecutivo de la MUD, Ramón Aveledo.
"Ellos conversaron con el gobierno ayer y ahora van a conversar de nuevo; siguen haciendo esfuerzos en ese sentido. Nosotros tenemos que agradecer el esfuerzo de los cancilleres, del nuncio y su Santidad", señaló el dirigente.
El líder opositor añadió que luego de esa próxima conversación con las autoridades, los mediadores transmitirían a la MUD "la respuesta del gobierno sobre los planteamientos, a ver si la situación pasa al diálogo o sigue congelado", reportaron el canal Globovisión y el diario Ultimas Noticias.
Hasta última hora de esta tarde, el gobierno no había informado sobre contactos de sus funcionarios con los cancilleres y el nuncio.
El gobierno y la oposición de Venezuela acordaron iniciar un proceso de diálogo con el objeto de superar la crisis generada por las protestas cotidianas iniciadas el 6 de febrero pasado, que dejaron 42 muertos, 835 heridos, 3.102 detenidos -de los cuales 252 permanecían privados de libertad- y 160 investigaciones por presunta violación de derechos humanos, según datos oficiales.
El diálogo fue instalado el 10 de abril en el palacio presidencial de Miraflores, con un debate íntegramente televisado, y continuó con dos reuniones a puertas cerradas en la sede de la Vicepresidencia, el 15 y el 24 de abril, tras la cual el vicepresidente Jorge Arreaza y Aveledo anunciaron una serie de acuerdos.
La cuarta reunión iba a realizarse primero el miércoles 7 y luego el jueves 15, pero en ambas ocasiones fue postergada, hasta ahora sin fecha conocida.
Entre tanto, Aveledo y otros dirigentes de la MUD informaron que habían suspendido las conversaciones con el gobierno debido al incumplimiento de éste de los acuerdos alcanzados.
La MUD sostiene que el gobierno no honró compromisos asumidos acerca de cuestiones como la formación de la "comisión de la verdad" que debe investigar los hechos de violencia de los últimos tres meses, así como la revisión de la situación de algunos presos considerados políticos por la oposición, como el excomisario Iván Simonovis.
El clima había sido anticipado de algún modo el lunes pasado por Holguín: "Le hemos dicho mucho al gobierno venezolano que tratemos de avanzar para que la gente crea en el diálogo en Venezuela, donde yo creo que no hay ninguna otra solución entre las partes", advirtió entonces la canciller colombiana.
Fuente: Télam