"El lanzamiento realizado por Corea de Norte es inaceptable", dijo el ministro portavoz del Gobierno nipón, Osamu Fujimura, en una rueda de prensa convocada en la oficina del primer ministro, Yoshihiko Noda.
El Ejecutivo y la Policía indicaron que no se reportó ningún daño en la región de Okinawa, en la que se habían desplegado sistemas antimisiles como medida de precaución ante el lanzamiento previsto.
Además, Japón solicitó a Naciones Unidas que convoque una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad con motivo del lanzamiento, informó la agencia Kyodo.
El embajador nipón ante el organismo, Tsuneo Nishida, transmitió formalmente la petición a Marruecos, presidente del Consejo de Seguridad durante el mes de diciembre.
El régimen norcoreano defiende que se trata de una operación pacífica para poner en órbita un satélite de observación, pero Japón, Corea del Sur, Estados Unidos y otros miembros de la comunidad internacional sostienen que se trata de una prueba encubierta de un misil balístico intercontinental.
Esto supondría una violación de resoluciones de la ONU que prohíben a Pyongyang realizar pruebas atómicas y de misiles.
Los expertos consideran el Unha-3 como una versión avanzada del proyectil de largo alcance norcoreano Taepodong-2, según despacho de EFE.
El lanzamiento del Unha-3 es el segundo de este año por parte de Corea del Norte, y también el segundo bajo el liderazgo del joven Kim Jong-un, tras un primer intento en abril que concluyó en fracaso, después de que el proyectil se precipitara al Mar Amarillo poco después de despegar.
Fuente: Télam