Los Darden se presentaron un día antes para una visita que había sido programada a través de su representante legislativo.
La Casa Blanca y el Servicio Secreto dijeron que los Darden pasaron por las revisiones de seguridad necesarias y se les permitió asistir al desayuno como cortesía porque no había visitas públicas ese día.
Esa explicación no la conocía Harvey Darden, un farmacéutico retirado de 67 años, quien dijo que a él y su esposa no les dijeron nada del desayuno. Pensaron simplemente que estaban comenzando su visita hasta que les llevaron al Salón Este, les ofrecieron un buffet y les dijeron que iban a conocer al presidente.
"Mientras más nos adentrábamos en la Casa Blanca, más sorprendidos estábamos", Darden le dijo a The Associated Press en una entrevista telefónica. "Mi esposa me miró y yo la miré, y dije: ´Sabes, no sé si estamos donde debemos´ ".
Cuando se acercaron a un asistente en la Casa Blanca para expresarle sus inquietudes, éste les dijo que no se preocuparan, afirmó Darden.
Un portavoz de la Casa Blanca, Nick Shapiro, dijo que como los Darden pasaron la inspección de seguridad se les permitió asistir al desayuno como un "gesto de cortesía", y aseguró que ese tipo de situaciones no son inusuales para el personal de la casa presidencial.
Fuente/ 26noticias.com.ar