Kiev y potencias occidentales acusan a Rusia de armar y financiar a los rebeldes separatistas, que combaten al Ejército ucraniano desde abril pasado, y temían que Moscú usara la misión humanitaria para establecer una presencia militar permanente en el este del país o ingresar armas para los separatistas.
"Dada la iniciativa del presidente de Ucrania, Petro Poroshenko, sobre la recepción de ayuda humanitaria en el marco de la misión internacional bajo la égida del Comité Internacional de la Cruz Roja, (ordeno) reconocer la carga como ayuda humanitaria", indicó el decreto firmado por la ministra de Polí­tica Social, Ludmila Deni­sova, informó la agencia de noticias EFE.
Representantes de la Cruz Roja empezaron hoy la revisión selectiva de la carga humanitaria que se encuentra a bordo de 262 camiones rusos en la frontera ruso-ucraniana.
Los primeros 16 camiones integrados en el convoy humanitario ruso salieron del aparcamiento en el que se encontraban desde hace tres dí­as para dirigirse al paso fronterizo ruso Donetsk, desde donde está previsto que cruce la carga al territorio ucraniano, aunque es poco probable que sea hoy.
Una de las razones es que el gobierno de Kiev, que mantiene una encarnizada lucha contra los separatistas pro rusos en el territorio por el que deberá cruzar la ayuda humanitaria hasta llegar a la ciudad de Lugansk, no ha garantizado todavía la seguridad del convoy a la Cruz Roja.
Una vez resuelto este asunto, será la organización internacional la responsable de transportar, gestionar y repartir las 1.900 toneladas de la carga humanitaria rusa entre la población civil de Lugansk, ciudad rebelde sitiada y al borde de la catástrofe humanitaria, ya que carece de agua y luz desde hace dos semanas y fue abandonada por la mitad de su casi medio millón de habitantes.
Los 262 camiones rusos, en cada uno de los cuales deberá ir al menos un miembro de la Cruz Roja, por exigencia de Kiev, cruzarán a Ucrania por el paso fronterizo ucraniano Izvirino, en manos de los separatistas al igual que buena parte de toda la ruta que separa la frontera del destino final de la carga.
En este contexto, poco después de que se diera el visto bueno al envío ruso, las autoridades de Ucrania denunciaron la entrada esta madrugada de una columna militar rusa formada por tres camiones portadores de lanzamisiles de boca múltiple "Grad" (Granizo), un arma capaz de arrasar superficies de hasta 15 hectáreas.
El portavoz del Consejo de Seguridad Nacional y Defensa de Ucrania, Andrei Lisenko, aseguró en rueda de prensa que los tres camiones cruzaron la frontera y se dirigieron hacia la localidad ucraniana de Nizhni Nagolchik, en la región de Lugansk.
Las autoridades ucranianas denunciaron además que detectaron 10 aviones no pilotados rusos sobrevolando su territorio, la mayorí­a de ellos sobre la región de Jerson, próxima a la pení­nsula de Crimea, anexada a Rusia en marzo.
Ucrania ya denunció hace dos días la entrada de una columna de blindados rusos en Lugansk, presunto incidente que ya están investigando tanto la OTAN como la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE).
Rusia siempre negó cualquier apoyo con armas a los rebeldes.
Fuente: Télam