Según el relato del hijo, Sánchez fue introducido en el baúl del auto por efectivos de la Policía Nacional cuando se encontraba descansando en los alrededores del puente Pavayoc.
Sánchez, que era alcalde del municipio Kepashiato y aparentemente participaba de un piquete, fue la segunda víctima fatal registrada en el contexto de las protestas iniciadas hace 12 días en la provincia cusqueña La Convención, pues el martes pasado murió baleado un adolescente de 16 años que formaba parte de una manifestación.
El auto que cayó al río llevaba rumbo a la comisaría local a manifestantes que habían sido detenidos por la Policía, según testimonios recogidos por la prensa local y citados por la agencia de noticias EFE.
Pobladores afirmaron que policías provocaron la caída del coche al intentar llevar por la fuerza a los detenidos, mientras el jefe
policial de la zona, Máximo Sánchez, rechazó esa versión y aseguró que el conductor hizo una mala maniobra y perdió el
control del vehículo.
Decenas de policías están destacados en La Convención con el objeto de desbloquear las rutas tomadas por los manifestantes.
El Frente de Defensa de los Intereses de La Convención, Yanatile y Lares planteó una plataforma de reclamos de 19 puntos, entre los cuales se encuentra el rechazo a la construcción de la hidroeléctrica Santa Teresa y el Gasoducto Sur Peruano, y el supuesto mal uso del cánon gasífero en la región.
El jefe policial Sánchez agregó que la Policía actuaba con conocimiento de la Fiscalía y la Defensoría del Pueblo, y en presencia de representantes de medios de comunicación.
"Mi comando está tomando todas las medidas para reforzar todos los puestos, nosotros somos respetuosos de los derechos humanos de todas las personas, pero los manifestantes tienen que entender que se debe respetar el derecho a la libertad y el libre transito de los pobladores", subrayó Máximo Sánchez.
El defensor del Pueblo, Eduardo Vega, llamó al "cese inmediato de la violencia" en La Convención e informó que las autoridades de esa provincia deseaban establecer un diálogo con el gobierno central.
"Debemos frenar esta situación ahora mismo, ya que están falleciendo varias personas en diversas circunstancias, pero en el contexto del paro que está ocurriendo en esta provincia", dijo Vega tras lamentar el fallecimiento del alcalde distrital.
En tanto, el representante de la Defensoría del Pueblo en Cusco, Silvio Campana, expresó su esperanza de que se genere un espacio de diálogo para solucionar la situación.
Campana aseguró que en Quillabamba, capital de La Convención, las actividades están paralizadas y se registraban problemas de desabastecimiento.
Agregó que los dirigentes de la protesta pidieron una reunión en Quillabamba con representantes del gobierno central, pero éste respondió que se trata de un problema local conducido por "unos cuantos exaltados".
Según Campana, las protestas movilizaron a unas 5.000 personas que realizan marchas hacia distintos puntos de la provincia y forman numerosos piquetes para obstruir rutas y caminos.
Los ministros del Interior, Daniel Urresti, y de Justicia, Daniel Figallo, afirmaron ayer en conferencia de prensa que las protestas están impulsadas por personas con intereses políticos relacionados con las elecciones regionales del 5 de octubre próximo y ratificaron que el Ejecutivo no intervendrá mientras los reclamos no sean analizados en el nivel local.
Fuente: Télam
