Desde ese día sobrevivió expuesto a los elementos y en su bote, Lela, de 5 metros de eslora, recorrió casi 1.700 kilómetros hasta que, al parecer el jueves 2 de febrero por la noche llegó a tierra en la isla colombiana de San Andrés.
"Yo atendí al pescador el viernes, ya le dieron de alta... Me dijo que había llegado de noche, que llevaba 20 días perdido en el mar, que cogía agua de lluvia y que estuvo a la deriva y perdido por varios días hasta que llegó a la isla", relató el médico Hernán Jiménez, que lo atendió en un hospital de San Andrés.
"Tenía deshidratación y una hipoglicemia obviamente por la alimentación inadecuada de unos 15 días. Él dice que comía pescado, pero que se los comía crudos", añadió Jiménez.
Según el galeno, el pescador le contó que al inicio del viaje "tenía una Pepsi-Cola y un pan, que los hizo rendir dos días", después de los cuales no encontró tierra y entendió que su suerte estaba echada.
"Tenía un recipiente donde podía recoger el agua de la lluvia, aunque casi no llovía... Le pregunté: ´¿Y tu pescado?´. ´Lo tuve que botar porque se pudrió, respondió", expresó el médico.
Méndez consideró "milagroso" haber sobrevivido, aunque perdió unos 9 kilos de peso. "Estoy muy contento de estar vivo", aseguró.
El hombre le contó al Doctor Jiménez que pensó que era un espejismo cuando el viernes vio "una montañita", que resultó ser un arrecife de la isla de San Andrés.
Alejandro Díaz, un obrero de la construcción de 35 años, acogió en su casa a Méndez mientras puede regresar a Puerto Rico. "Soy cristiano y una de las cosas que yo profeso es que quien ayuda a otra persona le está sirviendo a Dios", expresó.
Emiliana Bernal, secretaria de Interior de San Andrés, indicó telefónicamente que lo más posible era que Méndez estuviera de regreso en su país entre el miércoles o jueves de esta semana. 26noticias.com.ar