Los ataques más masivos se registraron en un mercado popular al aire libre en la zona sur de la ciudad de Hillah, a unos 100 kilómetros al sur de Bagdad, y en la principal zona comercial de la ciudad de Suwayrah, a unos 40 kilómetros al sur de la capital.
Al menos 13 personas murieron en los dos ataques y otros 26 resultaron heridos.
La violencia sectaria y los ataques extremistas contra las fuerzas de seguridad en Irak causaron la muerte de casi 1.000 personas y heridas a más de 2.000 en septiembre
En ambos casos los atacantes dejaron estacionados coches repletos de explosivos en el barrio que fueron activados en momentos en que cientos de personas transitaban por las calles.
Lo mismo sucedió en las ciudad de Kut, Sumawah, Diwaniyah y en Basra, todas al sur de Bagdad. El saldo fue de 16 muertos y decenas de heridos.
Además, otro coche bomba explotó en la ciudad norteña de Samarra cerca de una pequeña multitud de personas que se habían reunido en la calle para despedir a las 17 víctimas que había dejado un atentado similar el sábado pasado. Dos iraquíes murieron y otros 15 resultaron heridos.
La violencia sectaria y los ataques extremistas contra las fuerzas de seguridad en Irak causaron la muerte de casi 1.000 personas y heridas a más de 2.000 durante septiembre, en uno de los meses más mortíferos de los últimos años, según datos de Naciones Unidas.
En total, el número de víctimas fatales asciende a más de 5.000 desde abril, cuando la espiral de violencia sectaria comenzó a escalar y revivió los temores de que el país quede, otra vez, al borde de una guerra civil como sucedió en los convulsionados años 2006 y 2007.
Fuente: Télam