"Existen distintos modelos para asignar probabilidades de que un terremoto ocurra en una determinada área, pero todos están aún en fase de estudio y ninguno puede hacer una previsión con certeza" de otro movimiento, dijo Renata Rotondi, primera investigadora en el IMATI.
Los bomberos informaron que las excavaciones en el centro de L’Aquila, particularmente en la calle Gabrielle D’Annunzio, concluyeron hoy porque todas las personas que habían sido denunciadas como desaparecidas fueron halladas, consignó la agencia italiana ANSA.
No obstante, los bomberos enfatizaron que seguirán con la remoción de escombros y búsqueda de eventuales desaparecidos, aunque hasta el momento no han recibido más denuncias.
Mañana se realizarán los funerales de otras seis víctimas del terremoto, cuyos cuerpos fueron recuperados de los escombros entre ayer y hoy.
Según datos del Centro de sismología europeo que tiene sede en Francia y que registra todos los temblores que se producen, desde principios de 2009 ningún terremoto en el mundo provocó un número tan alto de muertos.
A partir de enero de este año se verificaron 32 terremotos de intensidad igual o superior al sismo que afectó a Italia central. El más fuerte, de magnitud 7,9, se produjo el 19 de marzo en aguas de la isla de Tonga, al este de Australia, pero no provocó daños ni a personas ni al ambiente.
El Papa envió hoy al arzobispo de L’Aquila dinero para gastos inmediatos de los damnificados por el terremoto y 500 huevos de pascua para los niños de Abruzzo, además de vestimentas sacras y cálices para celebrar misa, dijo el director de prensa vaticana, el jesuita Federico Lombardi.
El arzobispo de L’Aquila, Giuseppe Molinari, celebrará la misa en la Escuela de la Guardia de Finanzas, la misma donde ayer se desarrollaron los funerales solemnes para 205 de las víctimas. Misas y almuerzos de pascua serán organizados además en los 32 campos que hospedan a 18 mil personas que han perdido sus casas. (Telam)