A raíz de ello, una de las ocupantes de la moto sufrió una fuerte caída, provocándole hematomas varios en su cuerpo. A raíz de ello, los vecinos informaron al personal policial que se hizo presente al instante, quienes a su vez llamaron al servicio de emergencia del hospital desde donde avisaron que era imposible el arribo urgente de la ambulancia por no contar con chofer en ese momento. Por ese motivo, los uniformados trasladaron a la accidentada en una camilla a bordo del móvil policial, acompañada del médico de turno, Dr. Octavio Rodríguez y personal de Defensa Civil Municipal que se encontraba en el lugar.
Debemos resaltar que la queja de vecinos en ese momento se hizo sentir con gran énfasis, ya que la jovencita debió esperar cerca de media hora tendida en el suelo por la falta de ambulancia.
Por otro lado, es destacable la premura con la que actuaron los efectivos de la Comisaria de Fiambalá como así también el médico de turno, Dr. Octavio Rodríguez y personal del hospital local, quienes hicieron lo imposible para que la accidentada tuviese atención médica en la brevedad.
El motivo principal de la falta de chofer, es que desde hace mucho tiempo no se les paga las guardias activas. Por ese motivo, cada chofer debe esperar en su domicilio hasta que se les informe de alguna emergencia, lo que sobrelleva que pasen los minutos donde muchas veces son esenciales para salvar una vida.
De esta manera, nuevamente se pone al descubierto las falencias existentes dentro del Área Programática N° 10, durante la gestión de la polémica médica Sofía Bellido, quien al parecer continúa regentando con el apañamiento del gobierno de la provincia, a pesar de su renuncia forzada por las supuestas irregularidades que pesarían sobre él aérea que ella dirigía o dirige. Mientras tanto, el personal de salud en general debe trabajar con los mínimos recursos, pagos adeudados, faltantes de todo tipo, pero con mucha vocación y empeño que el gobierno no lo sabe valorar.
Los más humildes y de escasos recursos; los habitantes de zonas alejadas y los accidentados –como en este caso-, deben padecer de no contar con un servicio óptimo de salud por el simple hecho que los superiores de la provincia se encaprichan en tolerar a ciertos funcionarios de la salud (no a todos), transformando algunos hospitales o ciertas áreas programáticas en un aguantadero de inútiles que cuando ocurre algo grave, recién salen a diseminar jocosas excusas de todo tipo.
www.elabaucandigital.com