Entre los lineamientos es fundamental tener en cuenta que el suicidio es prevenible. Al informar sobre el suicidio en general se debe Interpretar las estadísticas cuidadosa y correctamente. Recurrir y utilizar fuentes de información que sean auténticas y confiables. No realizar comentarios espontáneos –muchas veces inconscientes- que refuerzan los mitos y estigmas sobre el tema.(Ver mitos). Evitar las generalizaciones basadas en cifras pequeñas ya que requieren particular atención. Del mismo modo que es recomendable no utilizar expresiones tales como “epidemia de suicidios” y “el lugar con mayor tasa de suicidios en el mundo”. No informar el comportamiento suicida como una respuesta entendible o justificable a los problemas o cambios sociales.
Asimismo, al informar sobre el suicidio en particular: Evitar la cobertura sensacionalista. No realizar descripciones detalladas del método de suicidio utilizado ni ilustrar con imágenes reales o dramatizadas. No resumir la causa de suicido a un solo factor: “Se suicidó porque estaba en bancarrota” o “Se suicidó por una pena de amor”, ya que las causas de suicidio son complejas y resultan de diversos factores. El suicidio no deberá describirse como un método para enfrentar problemas personales tales como una traición, incapacidad de afrontar una situación, abuso sexual, etc. En cuanto, a la comunicación del suicidio de una celebridad (artística, política, deportiva, etc.) deberá evitarse la cobertura sensacionalista, minimizándola hasta donde sea posible y evitando exageraciones. Es importante que el tratamiento periodístico tenga siempre en cuenta el impacto sobre las familias y otros sobrevivientes en términos del estigma y el sufrimiento
Claves
SÍ - Trabajar estrechamente con autoridades de la salud en la presentación de los hechos y la interpretación de los datos estadísticos.
SÍ - Referirse al suicidio como un hecho logrado.
SÍ - Presentar sólo datos relevantes en las páginas interiores de los soportes gráficos o digitales, no en los titulares.
SÍ - Resaltar las alternativas al suicidio y difundir señales de riesgo para tener en cuenta.
SÍ - Proporcionar información sobre líneas de ayuda y recursos comunitarios. NO - Realizar comentarios espontáneos que refuerzan el estigma, crean situaciones de alarma y no colaboran con el adecuado tratamiento mediático.
NO - Referirse al suicidio como un hecho exitoso.
NO - Publicar la información en la tapa de los soportes gráficos o el home de un sitio web. No publicar fotografías o cartas suicidas.
NO - Describir detalles específicos del método utilizado, ni imágenes que ilustren los mismos.
NO - Interpretar el hecho suicida como una conducta frente a los problemas o cambios sociales sin analizarlo con la complejidad que conlleva.
Mitos
Ø El que dice o amenaza con que se va a matar, no lo hace. La mayoría de las personas que se suicidan, hicieron saber el propósito de acabar con su vida.
Ø El que se suicida está atravesando una depresión. Puede ocurrir durante un proceso depresivo o no.
Ø Hablar con una persona sobre sus intenciones de matarse incrementa el peligro de que lo realice.
Ø Hablar sobre suicidio reduce la posibilidad de cometerlo y puede ser una oportunidad para ayudar a quien está padeciendo.
Ø El suicidio no se puede prevenir porque ocurre por impulso. Toda persona antes de cometer un intento de suicidio evidencia una serie de síntomas que de ser detectados a tiempo pueden ayudar a evitarlo. Algunas de estas señales de alarma son: aislamiento, persistencia de ideas negativas, desesperanza, llanto incontrolado, retraimiento de los sentimientos, inhibición de la agresividad (la cual ya no es dirigida hacia otras personas reservándola para sí), súbitos cambios de conducta y existencia de fantasías suicidas.
Ø El que intenta el suicidio es un cobarde o un valiente. Las personas que intentan suicidarse no son cobardes ni valientes, sino personas que sufren. El suicidio no es ni bueno ni malo, tampoco un hecho delictivo.
Ø La tendencia al suicidio es hereditaria. No es hereditaria, lo único que puede transmitirse por la educación es ver el suicidio como una forma de solución a los problemas.