Los gritos de la víctima obligaron a los sujetos a darse a la fuga por 25 de Mayo hacia el norte, mientras que la chica se dirigió a la comisaría Primera a radicar la denuncia.
Según describió, uno de los agresores era de contextura robusta, vestía un buzo amarillo y pantalón de jeans.
Los otros dos usaban buzos negros y pantalones de jeans. Los tres llevaban gorras de lana.
La policía los buscó pero no logró ubicarlos.