Los uniformados lograron atraparlos, los trasladaron en forma preventiva hasta la dependencia, e informaron al departamento de Flora y Fauna para que se hiciera cargo de los pumitas.
La cría de estas especies, en un hábitat que no es el natural, está prohibida por la ley, por lo que suponen que nadie los reclamará.
La investigación buscará determinar quienes son sus posibles dueños, pues se sospecha que podrían tener más ejemplares en cautiverio, o bien tener animales más grandes.