Este colectivo que partió de la capital provincial a las 13:15, transportaba 22 pasajeros, entre ellos personas con problemas delicados de salud y niños. Al llegar a cercanías del campamento de Vialidad provincial, el colectivo sufre el reventón del pulmón de suspensión delantero izquierdo, causando el descontrol total del vehículo, produciendo que el mismo se cruzara al carril contrario para luego salirse de la ruta, pasando por un terreno separador y finalizar el recorrido en una bici senda de los barrios 32 y 30 viviendas.
El micro luego del reventar el pulmón, paso por un sector de tierra a la velocidad que venía en ruta saltó unos 5 metros para luego impactar con el cordón cuneta, produciendo una dispersión de material de cemento lo que provocó que alcanzara a una mujer que circulaba por el lugar en motocicleta, lesionándola en una de sus piernas por lo que quedó tendida en el pavimento y que fue asistida en su primer momento por tres enfermeras de Fiambalá que viajaban en el micro.
El colectivo avanzo sin frenos unos metros más por esa vice senda, gracias a las maniobras realizadas por el chofer quien evito que no chocara con algo de frente o volcara, evitando así que se produzca una verdadera tragedia donde la historia seria diferente.
A los pocos minutos arribo personal del hospital de Chumbicha. Policía y bomberos, alertados por lo sucedido.
Según el relato de pasajeros, el caos dentro del colectivo en ese momento fue impresionante donde se escuchaba gritos y una polvareda impresionante que impedía la visualidad dentro del coche. Al parecer este accidente se habría evitado si desde la empresa se realizarían más controles excautivos para verificar el buen funcionamiento de los móviles y no recargando en sus tareas a los choferes.
Luego de todo esto, los pasajeros debieron esperar hasta la hora 20:30, el colectivo que provenía desde an F. del valle de Catamarca para arribar a destino. Es grato destacar por parte de la totalidad de los pasajeros, la predisposición, ayuda y buenos gestos de los vecinos de los barrios 30 y 32 al invitarlo a sus domicilios y asistirlos con lo que necesitaban en el momento, solidarizándose por el terrible momento que pasaron.
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Por otro lado debemos decir también que en ningún momento se hizo presente el personal de salud de Chumbicha donde se encontraban los pasajeros del colectivo para ver el estado de salud físico o psicológico de todos los ocupantes, teniendo en cuenta que viajaban dos personas que necesitaban asistencia médica, y la gran mayoría –incluyendo niños- que se encontraban en un estado de shock psicológico.