En tal sentido el fallo lo encontró culpable del delito de abuso sexual con aprovechamiento de la inmadurez de la víctima, lo que anteriormente se conocía como estupro.
A raíz de este hecho, la menor que tenía 13 años de edad al momento del hecho, quedó embarazada y dio a luz una nena en mayo del año 2005, cuya paternidad fue probada a través de una prueba de ADN, con el 99,9% de certeza respecto del acusado.