Con la presencia policial, la noticia comenzó a correr de boca en boca, hasta que se concentraron más de doscientas personas en el vértice de la plaza Libertad deseosas de ser testigos de la inminente tragedia. Todas las miradas buscaron en lo alto de los edificios, al presunto suicida, pero no lo encontraron. La Policía, tampoco, por lo que desconcentró a la masa.
Fuente: elliberal.com.ar