Para los investigadores, si el dinero estuvo en el lugar del hecho podría quedar probada la participación del padre del detenido -ambos llamados Rafael Bravez-, quien si bien finalizó herido se sospecha que pudo haberse autoinfligido las lesiones para simular ser víctima.
Por el momento, la justicia sospecha que el ingeniero Bravez, de 52 años, pretendió robar 300 mil dólares en complicidad con un amigo, de 42, y por lo menos tres delincuentes. (Télam).-