Oscar Sergio Bulacio, de 49 años, había cumplido una promesa a la Virgen y regresaba a esta ciudad. En las sierras de Guasayán, más precisamente entre los kilómetros 84 y 85 de la ruta 64, a la altura de la localidad Santa Catalina, Bulacio chocó contra la parte trasera de un colectivo de la empresa El Rayo, que había partido desde Las Termas hacia Catamarca.
La colisión se habría producido en una curva. Bulacio se conducía en una motocicleta Kawasaki de alta cilindrada. La policía realizó las pericias correspondientes y se aguardaban los informes para tratar de establecer cómo se produjo el accidente.
Producto del impacto, el motociclista sufrió múltiples lesiones, pero la más grave fue una fractura en su cráneo.
Minutos después de que se produjera el accidente, un médico que viajaba con su familia pasó por el lugar. Al observar la situación intentó asistirlo de inmediato. Enseguida arribó una ambulancia y decidieron trasladarlo al Hospital Regional por la gravedad de las heridas que presentaba, especialmente en su rostro.
El médico que pasaba por el lugar dejó a su familia y viajó en la ambulancia asistiendo al hombre, hasta ese momento herido. En el caminó la víctima sufrió un paro cardiorrespiratorio y llegó al centro asistencial capitalino con el profesional reanimándolo con masajes cardíacos en la ambulancia.
Ya en el hospital los médicos de guardia redoblaron los esfuerzos, intentaron por varios minutos reanimarlo, pero no fue suficiente y el hombre dejó de existir minutos antes del mediodía.
Fuentes del lugar señalaron que el médico que lo asistió en el hospital había solicitado la presencia del médico de policía, ya que a su consideración la víctima tenía huellas de neumático en su torso.
Drama
Escenas dramáticas se vivieron en el Hospital Regional cuando los familiares de la víctima se enteraron de lo ocurrido.
Durante los primeros minutos la policía no podía identificar al hombre, domiciliado en el barrio Francisco de Aguirre.
El primero en llegar al centro asistencia fue uno de los hijos de Oscar Sergio Bulacio, éste comenzó a preguntar por su padre hasta que uno de los médicos que lo asistió le dio la mala noticia.
Minutos después llegó otro de los hijos de la víctima y junto con su hermano no encontraban consuelo. Luego se hizo presente en el hospital la esposa del difunto que tampoco encontraba explicación a lo sucedido.
Ayer, la policía investigaba el hecho ya que no estaban claras las circunstancias en que se produjo la colisión. Al parecer había algunas dudas respecto de la posible participación de un tercer vehículo en el hecho. Lo cierto es que las pericias serán las que aporten mayor claridad al respecto.
Fuente: elliberal.com.ar