Alberto y Romina Acro formularon estas declaraciones a horas de escuchar el veredicto por el crimen de Gonzalo, mañana a las 10 en los tribunales porteños de Lavalle 1171, donde los hermanos ex jefes de "Los Borrachos del Tablón", Alan y William Schlenker, y otros cuatro barrabravas están en el banquillo de los acusados.
En una entrevista con Télam, el padre de Acro aseguró que confía en que mañana escuchará un veredicto condenatorio por parte de los jueces del Tribunal Oral en lo Criminal 15.
"No hay forma de no condenarlos", sentenció Acro padre, sentado junto a su hija en una mesa de un café del barrio de Recoleta, próximo a su negocio de vidrios y marcos.
Consultado por el "pacto de silencio" entre los imputados al que hizo referencia al comienzo del juicio, el último 23 de marzo, dijo que "finalmente no se rompió" y que creía que Alan Schlenker logró eso a base de "dinero" o generando "temor".
Agregó que no vio "arrepentimiento" en los imputados, quienes a su parecer actúan como si supieran que el resultado los favorecerá. "Como que tienen el paquete comprado", graficó.
Consideró que "es bien palpable, la defensa es en conjunto: Le preguntan a Luna y defiende a Alan y a William, todos defienden a los hermanos".
"El poder de Alan es demasiado grande, varios en el juicio dijeron que a Alan no se le puede decir que no", sostuvo al respecto Romina Acro, y sentenció: "es típico código de mafias".
Los miembros del Tribunal Oral en lo Criminal 15 porteño, Javier Anzoátegui, Hugo Decaría y Héctor Grieben, definirán mañana la responsabilidad en el crimen de los hermanos Schlenker y Martín "Pluto" Lococo, acusados de instigadores, así como de Ariel "Colo" Luna, sindicado autor material.
También están acusados como coautores del crimen Rubén "Oveja" Pintos y Pablo "Cucaracha" Girón, todos presuntos exintegrantes de los "Borrachos del Tablón".
Sobre las razones por las que creen que su hijo fue asesinado, Acro dijo que fue "definitoria" la pelea que mantuvo en la llamada "Batalla de los Quinchos", en la que se dirimía el dominio de la barra, y donde Gonzalo derrotó y humilló a William Schlenker.
"La pelea (contra William) forma parte de esto, por lo soberbios que son, parece que no podían soportar que le hayan ganado una pelea delante de todos los demás", dijo Alberto Acro.
La "Batalla de los Quinchos" en febrero de 2007, fue uno de los primeros enfrentamientos por el dominio de los "Borrachos del Tablón" entre dos facciones lideradas por Alan Schlenker y Adrián Rousseau, cuyo lugarteniente era Gonzalo Acro.
Si bien esa pelea ocurrió seis meses antes del asesinato, para Romina Acro "ese fue el principio del fin de Gonza", y agregó: "La pelea en `quinchos` cambió las cosas, mi hermano no estaba considerado en su plan".
Con respecto a lo que creía que había ocurrido la noche del ataque, Acro dijo que a su hijo los agresores "fueron a matarlo directamente, acá no hubo nada de asustarlo", como planteó el fiscal del juicio, Gustavo Gerlero, quien por eso en su alegato acusó a todos de "homicidio con dolo
eventual".
"Si no, lo hubieran dejado rengo", agregó la hermana, quien aseguró que "se sabe que (a Gonzalo) lo estaban buscando" y que el ataque fue planificado.
En tanto, la joven aseguró que "el ensañamiento que tenían contra Gonza, lo trasladan a la familia", y que tiene que "soportar" que los imputados le "rían en la cara, que manden gente a amedrentar o que Lococo le grite en una audiencia `cagón` a un testigo".
Sin notar que bajaba la voz para decirlo, Romina Acro relató que sufre hace cuatro años amenazas en su teléfono celular y en el sitio web que creó para informar sobre el juicio (www.gonzaloacro.org), donde denunció que le escribieron "cerrá esa página de mierda, hija de puta. La próxima es Romina".
"Tengo miedo, es todo muy sucio, muy siniestro", agregó y recordó cuando Roque "Rocky" Raposo, miembro de la facción de Schlenker que quedó afuera del juicio por falta de mérito, la amenazó uno de los días de audiencia en las inmediaciones de los tribunales.
Sobre el veredicto de mañana, Romina dijo que "Justicia, sería escuchar perpetua", que fue lo que solicitaron en sus alegato los abogados querellantes, Cristian Poletti y Claudia Orgueira.
Gerlero, en cambio, solicitó una condena de 17 años de prisión para los Schlenker y Lococo, 18 para Girón, 20 para Luna y 21 para Pintos, a quien se le unificaría la pena con otra pendiente.
"Confiamos en la buena voluntad de los jueces", dijo Alberto Acro, aunque en caso de no obtener el resultado esperado avisó que va a "seguir luchando, en Casación o en donde sea".
Romina, en tanto, dijo que en caso de que mañana el veredicto no sea favorable, sería un "dolor", y agregó: "Más que a Gonza dos veces, nos matan a nosotros. Ya estamos muertos en vida".
Fuente: 26noticias.com.ar
