El cuerpo de la octogenaria fue encontrado el domingo a la mañana, tendido boca abajo en su cama, y rodeado de perros y gatos.
Llamó la atención que la casa estaba cerrada con candado desde afuera, y en el interior se observaba un gran desorden, principalmente en el comedor y en la habitación.
El domingo a la noche había sido arrestado un joven, mientras que ayer a la mañana había otras tres personas en esa condición, pero luego dos quedaron en libertad, mientras que los otros dos siguen en la dependencia policial.
Por el momento no se ha logrado determinar si falta dinero en la casa, ni tampoco si el hijo le envió un giro desde la Patagonia, y en tal caso, de qué monto sería.