Según la agencia DyN, la dirigente inició una querella a raíz de una parodia que el músico le había hecho el año pasado en el programa “Un Mundo Perfecto”, que él conduce por el canal América.
La sátira consistía en mostrar una fotografía de Bonafini en una pantalla con un sobreimpreso dinámico en su boca para simular que hablaba, incluyendo insultos y conceptos que la titular de las madres consideró “gravísimos”.
La acción judicial iniciada fue desestimada en primera instancia por el juez en lo correccional Raúl García y ratificada por la sala Quinta de la Cámara. Los jueces Rodolfo Pociello Argerich y Mirta López González consideraron que “se trata de una parodia, y tan grotesca la personificación que de ella se efectuó, que resulta impensado que alguien pueda confundirla”.
En el fallo, los magistrados consideraron que “lo grotesco, chabacano o grosero puede estar reñido con la ética o el buen gusto, pero en modo alguno puede excitar la competencia penal”.
Además, destacaron que “el reconocimiento público de Bonafini asegura que en general se tenga una opinión formada en relación a su persona, que no se modifica con esta exposición en tanto no se advierte que se pretenda poner en duda el crédito de la querellante, más aún cuando no se le ha atribuido ninguna cualidad especial”.
Fuente: minutouno.com.ar