Fuentes policiales revelaron que el procedimiento se realizó alrededor de las cuatro de la madrugada.
En un operativo de rutina, a la salida de esta ciudad y a la vera de la ruta nacional 9, detuvieron la marcha de una camioneta Volkswagen Amarok, dominio JHB-426, y se solicitó al conductor la documentación personal y del vehículo. En ese instante, los uniformados advirtieron que la persona que guiaba el vehículo, se mostró “muy nerviosa”.
En medio del operativo, uno de los policías le preguntó qué transportaba en la caja del rodado y el chofer habría manifestado que cigarrillos de origen paraguayo, ocasión en la que habría intentado sobornar al uniformado para que pudiera seguir viaje sin inconvenientes.
Al no aceptar la propuesta, el efectivo se trasladó a la parte trasera con el fin de corroborar qué había en la caja de la Amarok, tapada con una lona. Esta situación fue aprovechada por el conductor para fugar a toda velocidad, abandonando la documentación.
De inmediato, se dio parte al personal de la Seccional 31 y a sus compañeros de la caminera, quienes emprendieron la persecución por la ruta 9, hacia el sur, que conduce a la provincia de Córdoba.
Sin embargo, luego de recorrer 5 kilómetros, los uniformados advirtieron que sobre la banquina derecha de la cinta asfáltica, fue encontraba abandonada la camioneta y sin su ocupante.
Los efectivos realizaron un rastrillaje por la zona montuosa en busca del conductor, aunque con resultados negativos. Se cree que el sospechoso ascendió a un automóvil Volkswagen Bora bordó que, supuestamente, viajaba de apoyo y pasó minutos antes que arribara la camioneta.
De regreso, el jefe de la Seccional 31, comisario Luis Longo, con personal a su cargo, observaron que debajo de la lona que cubría la caja, había diferentes bultos empaquetados en bolsas negras embaladas. Al ser requisadas, advirtieron que se trataba de un cargamento con sustancias prohibidas.
Las autoridades informaron el hecho a la Dirección de Drogas Peligrosas, cuyo personal abrió los envoltorios y estableció que se trataba de picadura de marihuana, distribuida en “ladrillos”, de un kilogramo cada uno. En total, se estableció que transportaba 723 kilogramos de estupefacientes.
Al lugar también concurrió personal del área de Inteligencia Criminal de la Seccional 33 de Sumampa, que junto a otras dependencias tratan de ubicar al conductor.
La droga y la camioneta llegaron anoche a la ciudad capital, en medio de un impresionante operativo, a fin de que lleguen sin inconvenientes a la sede de Drogas Peligrosas, a donde quedaron a disposición de la Justicia Federal.
Fuente: elliberal.com.ar