Aprovechando que la familia de apellido Barros no se encontraba en el domicilio, los malvivientes picaron una pared de material, y una vez que cedió, ingresaron al inmueble para apoderarse de varios objetos, con los que huyeron raudamente.
Sin embargo, algunos vecinos que habrían observado movimientos extraños alertaron a la Policía que tomó conocimiento del hecho alrededor de las 18:00.
El caso quedó en manos de la Fiscalía de turno, mientras las actuaciones corren por cuenta del Precinto Noveno.