La madrugada había transcurrido sin inconvenientes en una fiesta familiar que se celebraba en una casa ubicada en el pasaje Cabo Juárez al 1.100. En esa vivienda estaba Lucas Damián Romero, un joven de 25 años que se convirtió en la víctima mortal de una trifulca en la que intervinieron varias personas, informó ayer la Policía.
Alrededor de las 6.30, dos sujetos, que viven al frente de la vivienda en la que se desarrollaba esta reunión familiar, quisieron entrar por la fuerza en la fiesta. Pero como los dueños de la casa no los dejaron pasar, comenzaron a insultarlos. Después insistieron con ingresar hasta que uno de ellos consiguió meterse en la vivienda. Esto provocó un enfrentamiento que llegó hasta la calle.
Los jóvenes que quisieron irrumpir en la fiesta son hermanos y, al verse superados en número, intentaron refugiarse en su casa. Pero las personas que estaban en la celebración los siguieron hasta el interior de la vivienda. De acuerdo con la investigación realizada por el personal de la división Homicidios, a cargo del comisario Marcelo Sallas, Romero se enfrentó a trompadas con uno de estos hermanos que tienen 23 y 32 años y que, posteriormente, fueron aprehendidos por el homicidio.
A pedradas
La pelea crecía en violencia. Y, según se informó, cuando los dos hermanos entraron a su casa las personas de la fiesta que no habían conseguido ingresar para arrinconarlos en el interior de su vivienda, comenzaron a arrojar piedras contra la fachada.
Esta reacción -a su vez- provocó la intervención del padre de estos sujetos que, armado con una escopeta calibre 16, comenzó a disparar en contra de quienes atacaban a sus hijos. Pero él no fue el único que utilizó un arma para disuadir a la muchedumbre. Un hombre, que al parecer es amigo de esta familia, sacó una pistola y acompañó los disparos de su vecino sobre las personas que habían estado en la fiesta.
En medio de esa violentísima contienda, Romero y uno de los dueños de la fiesta cayeron heridos de bala.
Según la Policía, Romero recibió una perdigonada en la zona del tórax y, debido a la gravedad de la herida, llegó sin vida a la guardia del hospital Padilla.
El otro herido fue llevado al Centro de Salud adonde llegó agonizante con una herida en el abdomen. Sin embargo, los médicos que lo operaron lograron salvarle la vida y, hasta anoche, permanecía internado con un pronóstico clínico reservado, pero estable.
Las represarías
Sallas explicó que luego del tiroteo, alrededor de las 6.50, intervino personal de la Seccional 11ª que logró controlar a los bandos que se estaban enfrentando. En ese momento, detuvieron al sujeto que utilizó la escopeta. “Este hombre sería el principal sospechoso del homicidio”, remarcó el comisario.
En este marco, el oficial explicó que los dos hijos del aprehendido también llegaron heridos al Centro de Salud. “Fueron a que los curen de las puñaladas que recibieron en las manos y en los brazos. En ese momento aprovechamos para aprehenderlos”, continuó Sallas.
Luego detuvieron al vecino que utilizó una pistola para intervenir en el enfrentamiento y, por orden de la Fiscalía IX°, que está a cargo de la fiscala María de las Mercedes Carrizo, se dejó una guardia policial para vigilar y aprehender al sujeto que quedó internado en el Centro de Salud.
Pero los problemas entre estas dos familias no terminaron ahí. Alrededor de las 17.30 un grupo de familiares y amigos de Romero intentó quemar la vivienda del sospechoso del homicidio. “Un grupo de Infantería tuvo que intervenir para poder sacar a los familiares del acusado porque este grupo incluso pretendía lincharlos”, concluyó Sallas.
El comisario Luis Omar Díaz, que estuvo a cargo del operativo para resguardar a la familia del imputado, explicó que la fiscala Carrizo dispuso que una guardia de Infantería resguarde el domicilio del acusado. Pero la furia de los vecinos no se amedrentó ante la presencia de los policías y se enfrentaron con los uniformados, que tuvieron que utilizar postas de goma para poder disuadir a la turba que avanzaba hacia la vivienda.
Después de esto, prendieron gomas para cortar el tránsito en la avenida reclamando justicia por la muerte de Romero. Ante este nuevo conflicto, el comisario Díaz dialogó con los familiares de la víctima, que finalmente decidieron levantar el corte.
FUENTE: lagaceta.com.ar
