Plaza llegó bajo los efectos de la cocaína, despertó a Montivero y cuando se encontraba parado del lado izquierdo de la cama, sacó de entre sus ropas una pistola calibre 11.25, con cargador para seis cartuchos.
El acusado comenzó a insultar y amenazar a la mujer, ante lo cual Montivero corrió para el otro lado de la cama, mientras Plaza le apuntaba con el arma.
Incluso gatilló dos veces con claras intenciones de matarla, pero los disparos no salieron. Luego intentó pegarle un culatazo, y nuevamente Plaza le apuntó y efectuó un disparo.
La bala ingresó en la región temporo-maxilar derecha, con orificio de 1,8 mm. de diámetro y salida en región cervical posterior.
Montivero se dirigió a otro dormitorio en el cual se hallaban durmiendo dos menores, a quienes contó lo que había sucedido.
El mismo Plaza fue quien la trasladó al hospital San Juan Bautista, donde la mujer se recuperó rápidamente.
Por este hecho, Marcelo “Visera” Plaza deberá responder en juicio por el delito de homicidio simple en grado de tentativa, agravado por el uso de arma de fuego.