Según trascendió de fuentes judiciales, “Moira” acusó a sus tres cómplices de haber planificado y concretado el homicidio del docente, y que ella fue una mera espectadora de lo sucedido.
La acusada desmintió haber tenido una relación sentimental con la víctima, aunque no dio una explicación acerca de qué estaba haciendo en la madrugada del 7 de septiembre de 1996 en un descampado cercano al ex hotel Sussex, junto a Marín.
De acuerdo a su relato, ambos fueron sorprendidos por tres personas, a las que no identificó, y que la ahorcaron a ella hasta hacerla desmayar.
Cuando volvió en sí, vio que Marín ya estaba sin vida.
Pero a renglón seguido sostuvo Mario Nieva, Gastón Fernández y Elizabeth Tatiana Arancibia la habían amenazado.
Al momento de explicar porqué se fue de la provincia, señaló que temía regresar porque sabía que iba a ser detenida, y que anduvo de mochilera por distintos lugares del país, hasta que conoció a quien hoy es su marido, con quien convive desde hace unos 8 años en la ciudad de Chivilcoy.
De ahora en mas, el fiscal ordenará una serie de medidas, y desde ya se prevé que le pedirá la prisión preventiva.