En las paredes del inmueble, también quedaron escritas palabras agraviantes para su moradora, que la damnificada atribuyó al sujeto con el que mantuvo una relación amorosa hasta hace algunos meses.
El episodio movilizó a numerosos policías, ya que la protagonista involuntaria de semejante culto sería una maestra jardinera, con residencia en ese barrio.
Víctima de un shock nervioso por el reciente asesinato de otra maestra jardinera, Leda Fabiana Raimundi, la docente acosada pidió ayer a la policía custodia y una salida inmediata a un problema iniciado tres meses atrás.
De acuerdo con la ampliación de su denuncia, un año atrás puso fin a una relación con un comerciante.
Reticente en aceptar un no como desenlace, él habría empezado a librar una batalla a través de mensajes al celular de la denunciante.
Según la docente, intercaló frases amorosas de arrepentimiento, matizándolas con advertencias enfáticas: ‘O vuelves conmigo o la vas a pasar mal’, sería apenas uno de los tantos ultimátum que ya obra en poder de la policía que secuestró el celular de la mujer.
Así, durante varias semanas, éste habría procurado restablecer la relación, sin lograr conmover a la maestra jardinera, de 36 años.
Según la denuncia, ayer a la madrugada se produjo un montaje de un ritual umbanda frente a la casa de la mujer. Nadie vio nada ni vecinos ni familiares.
Para los efectivos de la Seccional 11, se trató de un ritual netamente vengativo.
Al amanecer, la docente casi se desmayó al contemplar en su casa las vísceras de una vaca clavadas con alfileres, plumas, perfume. De paso, el anónimo empleó un aerosol para insultarla tildándola de lo peor.
La policía secuestró el aparato y comenzó con una serie de citaciones.
En forma simultánea, en la víspera solicitó asistencia psicológica para la víctima, quien requerirá una restricción judicial que le impida al personaje aproximarse a su domicilio, bajo pena de ser detenido convencida de que es el autor de las amenazas.
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