El hecho se produjo poco después de las 9 de la mañana en pleno centro de la ciudad, ubicada a 130 kilómetros de Bahía Blanca, cuando personal del banco comenzaba a llegar a la entidad, según confirmó el gerente, Juan Carlos Tessens.
Los delincuentes estaban ocultos en un patio interno sin cámaras y esperaron
la llegada del gerente para entrar al tesoro de esa sucursal bancaria, ubicada en la intersección de las calles 28 y 5.
Fuentes policiales informaron que los ladrones, que permanecen prófugos, tomaron como rehenes al vigilador y a todos los empleados que llegaban. Cuando arribó el gerente accedieron al tesoro y robaron una cifra estimada en más de un millón de pesos.
"El banco no tiene ni sistema de video ni alarma, redujeron al personal y se llevaron una suma de dinero. Ahora el banco tiene que hacer el arqueo" para determinar la cantidad robada, indicaron.
La Policía montó un operativo en los accesos a Luro para dar con los asaltantes, que se llevaron el dinero sin dejar heridos a bordo de un Peugeot bordó.
Fuente. Infobae