La Dra. Marta Elena Ovejero -a cargo de la Unidad de Violencia de Género e Intrafamiliar- pedirá al juez de Control que se dicte la prisión preventiva para el sujeto que llegó alcoholizado a su casa y supuestamente "poseído" agredió a su pareja en dos oportunidades.
Según contó la víctima, el primer hecho de violencia fue denunciado el 8 de diciembre del 2014, cuando el "guía espiritual", llegó ebrio a su casa mientras su pareja -con quien convive desde hace 11 años- dormía junto a su hijo.
Sin motivos, el hombre la tomó del cabello, la levantó de la cama y la corrió de la vivienda, aduciendo que había llegado poseído por un espíritu, que tenía el control sobre su cuerpo. La mujer temiendo por la integridad de su hijo se retiró de la casa.
"Tiró toda mi ropa a la calle y no es la primera vez que lo hacía", manifestó la víctima al declarar ante la Unidad Fiscal. Cansada del maltrato, la mujer decidió realizar la denuncia. El acusado fue aprehendido y luego excarcelado bajo estrictas medidas restrictivas, entre ellas la expulsión de la casa.
La damnificada contó que las discusiones se iniciaban porque su pareja tenía el "templo" en el interior de su casa y el ir y venir de gente era constante, para que éste les realizara "limpiezas" espirituales. Según la joven madre, era común que las "entidades" descendieran y se apoderaran de su cuerpo. Ésta recalcó que también vivía alcoholizado.
Ya con las medidas impuestas, el pai no podía acercarse a la víctima. El pasado 18 de enero, sin importarle violar una medida judicial, el acusado -en total estado de ebriedad- llegó hasta la casa de la mujer, cuando ésta se encontraba en la vereda de su casa, junto a su hijo.
"He venido a cumplir lo que te había prometido. Ahora te voy a matar. No voy a tener misericordia con vos", dijo el acusado y la tomó del cuello. La llevó hasta el interior de la casa y mientras trataba de asfixiarla, le hacía golpear la cabeza contra la pared.
El pequeño, asustado por ver a su madre totalmente ensangrentada, lloraba y le pedía a gritos a su padre que cesara con la violencia. Al ver que el hombre no deponía su actitud salió de la casa a pedir ayuda a los vecinos. Rápidamente familiares de la víctima llegaron a la casa y la auxiliaron.
En esa oportunidad, el sujeto no fue aprehendido, ya que al advertir que habían llamado a la policía logró huir e internarse en una zona montuosa y desde entonces es intensamente buscado, hasta que finalmente las autoridades pudieron dar con él.
Fuente. elliberal.com.ar