El veredicto fue dictado por la Sala III de la Cámara de Apelaciones de Mercedes, al encontrar culpable a Iribarren del quíntuple homicidio doblemente calificado por el vínculo y la alevosía.
La justicia entendió que Iribarren mató a sus padres, Luis Juan Iribarren, de 49 años, y Marta Langebbein, de 42, y a sus hermanos, Marcelo, de 15, y María Cecilia, de 9, y enterró sus cuerpos a 40 metros de la casa en la que vivían, en el paraje Tuyutí, a 30 kilómetros de San Andrés de Giles, en 1986. También le endilgó el homicidio de su tía Alcira, de 63 años, nueve años después. (Télam)