Pese a que la defensa de Martínez intentó impugnar esa diligencia porque el testigo había visto fotos del sospechoso en la prensa, el fiscal Alvaro Garganta, a cargo de la instrucción, interrogó esta tarde al remisero, quien volvió a describir al sospechoso y complicarlo.
A la espera de resultados de ADN, peritajes forenses y análisis sobre otros cuchillos que quedaron en la casa, los investigadores creen que Martínez (27 años) primero golpeó y degolló a su novia, Bárbara Santos; luego a la madre de ésta, Susana De Barttole (63), y en el pasillo a la nena de 11 años, Micaela Galle.
Justo en ese momento llegó Marisol Pereyra, de 35 años, a bordo del remís de Tagliaferro, y fue obligada a entrar a la vivienda, donde la arrojaron ferozmente sobre una mesa de cerámica y luego la degollaron. Incluso, el abogado Fernando Burlando, querellante en la causa, dijo que el remisero de casualidad no fue la quinta víctima.
"Declaré solamente lo que vi y lo que sé, nada más", dijo Tagliaferro tras presentarse ante el fiscal Garganta.
Si bien los testigos no necesitan abogados, Tagliaferro se presentó pasadas las 16 en la Fiscalía de La Plata acompañado de Burlando, representante legal de la familia de Marisol Pereyra. Precisamente, el remisero fue el que llevó en la madrugada del último domingo a Marisol hasta la casa de la calle 28 del barrio Las Lomas, donde vivían Bárbara Santos, su madre y su hija.
El remisero había dicho a la prensa que aquella noche acercó a la pasajera -a la que ya conocía- hasta esa vivienda, se quedó esperando en la puerta y pudo ver a un hombre que sería el principal sospechoso.
"Tocó un timbre y cuando el flaco sale se queda hablando un segundo en la puerta y ella en un segundo se mete para adentro. A los cuatro minutos salió (el hombre), lo veo por el espejo (del auto) y me hace señas. A propósito no le doy bolilla y se acerca al auto y me dice: ´Andate, andate, que va a llamar a otro remís después, se queda en nosotros´. Yo la dejé a las 12.22. A las 12.25 entró al pasillo. A esa hora la mató", afirmó.
En las últimas horas la defensa del karateca había solicitado la declaración del remisero para demostrar diferentes versiones que habría dado ante la prensa.
Fue así que el abogado Julio Beley primero planteó la nulidad de la rueda de reconocimiento que debía hacerse mañana y luego solicitó que se lo citara a ampliar la testimonial.
En ese marco, el fiscal suspendió la rueda de reconocimiento de presos que debía hacerse mañana y se dispuso a escuchar al remisero, que esta tarde ratificó los puntos centrales de la declaración.
Ante la prensa, Burlando aseguró que el remisero "es un testigo que declara sobre lo que vio y lo que declaró", afirmó que "en la causa la versión es una sola" y aseguró que "no había relación" entre el chofer y la víctima "más allá que la de remisero-cliente".
Además, Burlando fustigó la estrategia de la defensa que intentó desacreditar al remisero. Mientras tanto, el abogado Beley insistió en la necesidad de avanzar en otras hipótesis que deslinden a su cliente, en donde sugieren una pelea familiar por una sucesión, un juicio por alimentos que su novia tenía con el padre de su hija, un ex novio de Bárbara, deudas patrimoniales de la madre y hasta un primo supuestamente esquizofrénico de las víctimas que estaba sin medicación.
Martínez "está acongojado y con una tristeza interior que no puede exteriorizar porque todavía no le cayó lo que está pasando", sostuvo hoy su abogado, tras insistir en que su cliente prestó "un relato muy convincente" para demostrar que "no tiene ninguna participación" en la masacre.
Fuente: 26noticias.com.ar