La información fue revelada por una empresa de telefonía celular ante el pedido del juez federal de San Martín Juan Manuel Yalj, quien solicitó conocer los mensajes de texto que envió Balbi y sus horarios. El requerimiento fue hecho porque cuando el celular fue secuestrado, tras el accidente, el chip registraba que los mensajes de texto de ese día habían sido borrados.
"Balbi estaba haciendo algo que no era ver las señales, por eso no observó la luz amarilla. Él estaba sobre la izquierda del tren y era su obligación ver las señales", explicaron las fuentes. El conductor y su acompañante, Carlos Raviola, fueron procesados el 9 de marzo sin prisión preventiva por los delitos de homicidio culposo y lesiones leves culposas, graves y gravísimas, porque "no cumplieron los reglamentos a su cargo", como era respetar las luces rojas y conducir con los frenos habilitados.
Para el juez Yalj, Balbi "desantendió" la luz amarilla que le indicaba que debía disminunir la velocidad, mientras que Raviola fue el primero en ver la formación del San Martín parada en las vías, pero tenía "el freno de emergencia con candado", lo que le impidió accionarlo.
La resolución no fue apelada por la defensa de los maquinistas, pero sí por el fiscal Paul Starc, quien reclamó que los acusados sean procesados por el delito de homicidio simple, más grave que el culposo considerado por el juez. Para la semana próxima el magistrado espera los resultados de una pericia sobre el funcionamiento de ambos trenes, solicitada para determinar si las locomotoras y sus frenos estaban en condiciones para salir a las vías.
Con ese informe se determinará si hubo responsabilidades de las autoridades de Ferrobaires en permitir la salida de un tren en malas condiciones, como dijeron los maquinistas, y así resolver si son citados a declarar como acusados. El choque de trenes se produjo el 16 de febrero poco después de las 18:30, cuando la formación de Ferrobaires, que viajaba a Junín, colisionó con el vagón furgón de un tren de la línea San Martín que estaba detenido a la espera de llegar a la estación San Miguel, ubicada a siete cuadras del lugar del accidente. (Infobae)