El hecho se desencadenó a las 5,40 a pocos metros donde se venera la imagen del "Gauchito Gil". De acuerdo a los datos proporcionados por Accidentes Viales tuvo como protagonista a Sergio Nicolás Torres de 36 años, que vivía en la calle René Cárdenas sin número del barrio "Progreso".
Torres que ostentaba el grado de oficial principal, licenciado en seguridad, prestaba servicios en el Departamento Operaciones de la Jefatura de Policía, se desplazaba en una Honda Wave, negra, sin dominio, prácticamente nueva, en dirección sur norte.
Por causas que se procuran determinar, el motociclista habría perdido el control del rodado que le provocó la caída sobre la cinta asfáltica. En esa circunstancias fue arrollado por un Fiat Fiorino, color blanco, dominio GSK 274, que circulaba en igual sentido que la moto, al mando de Francisco Tomás Quinteros, de 32 años, con domicilio en el barrio Evita, quien viajaba junto a María Eugenia Luna, de 30 años, con residencia en la zona céntrica.
Al parecer por la proximidad y la velocidad el conductor del Fiorino no pudo evitar el choque contra la humanidad de Torres, quien fue rematado luego con un nuevo impacto provocado esta vez por otro vehículo, un Fiat Palio, verde, dominio CLW 718, conducido por Fabián Alberto Peralta, de 33 años, que vive en el barrio "Sociedad Rural".
Se pudo saber que el automóvil pertenecía a la empresa de remises "Cerro del Velasco", en tanto que trascendió que la camioneta prestaba servicios como distribuidor del diario colega "Nueva Rioja".
A poco de producido el hecho se hizo presente el juez de turno, doctor Manuel Alejandro Arce, como así también personal de la Policía Técnico Judicial. El juez ordenó el traslado del cadáver hacia la Morgue Judicial para la correspondiente autopsia.
La propia policía, según lo reconoció el jefe de Seguridad, comisario Antonio Chumbita, tuvo sus dudas sobre la identificación del cadáver y mientras avanzaba el mediodía crecían las expectativas por cuanto hasta esa hora no habían aparecido familiares, hasta que finalmente se hizo presente la esposa y dio fe de que se trataba de su marido.
Una vez concluida la autopsia e identificación del cadáver, el juez Arce ordenó la inmediata entrega del cuerpo a los familiares.
Fuente/ elindependiente.com.ar
