El dramático hecho se descubrió alrededor de las seis de la mañana, cuando Francisco Rafael Pereyra, padre de Maximiliano Javier, de 26 años, encontró a su hijo colgado y de inmediato avisó a la policía.
El hombre encontró el cuerpo de su hijo colgado de la rama de una mora, en la parte posterior de la casa, donde vivía junto a su familia.
Por ello, efectivos de la sub comisaría de Lavalle se trasladaron al lugar y avisaron a la médica Noemí Orellana Galleano, quien constató que no había signos de violencia.
Del hecho se informó al fiscal Alejandro Dalla Lasta, quien consideró innecesaria la realización de la autopsia, y ordenó la entrega del cuerpo a sus familiares.
Según las primeras investigaciones y testimonios brindados por familiares y allegados, la depresión habría sido el detonante de la drástica decisión