Al respecto, el camarista de San Isidro, Fernando Maroto, dijo que "es una verguenza lo que le sucedió al juez Melazo, ya que se trató de un ataque al sistema judicial y a la democracia".
El juez platense, al denunciar esta medida ante la Suprema Corte de Justicia provincial, consideró que se trata de "una maniobra repugnante" contra su "investidura y persona".