Karim Same, de 54 años, encargado del lugar, se encontraba en una casa lindera donde fue sorprendido por tres delincuentes encapuchados, entre ellos una mujer de acuerdo a las voces que escuchó, y que mediante golpes le sustrajeron la suma de $ 1.800 de la recaudación.
Sin embargo el damnificado no supo dar algunas precisiones, ya que no quedó claro si los delincuentes estaban armados, si podrían ser catamarqueños o de otra provincia, ni especificó si se movilizaban en algún vehículo.
Cuando los ladrones se fueron, Same pidió ayuda entre los vecinos y llamó a la policía, aunque hasta el momento no surgieron avances en la investigación del hecho.